PARA BIEN
Infumables VS incunables. Perdonen que afirme que la duda ofende y nos rebaja a unos niveles de mediocridad inauditos hasta para nosotros, no caigamos en los mismos errores y niveles de casposidad de los yankees. Estamos de acuerdo en que un gran director no es, a parte de un actor sin registros y sólo reseñable en gran medida como guionista, pero es un todo muy extenso, vale pero hay que observarlo como un todo aún así, como esos trípticos contemporáneos que por separado no dicen mucho pero en su conjunto… bueno vale, tampoco dicen mucho pero tienes más donde escarbar y más material para acertar. Entiendo y comprendo que mi opinión os puede resultar poco objetiva pero apropiándome de una idea del gran Allen “la objetividad es subjetiva”; pero no se puede ver una cinta como “Todo lo Demás “ a continuación visionar “Acordes y Desacuerdos” y sentenciar que disfruta de golpes de suerte, no hay que pensar que es el final de una película sino la continuación de su obra, y si algo posee Woody es la capacidad de sorprender cuando se presupone el fin de su carrera. La capacidad tan insultante de recrear las relaciones amorosas sin esconder el instinto animal en que se basan maquilladas en parafraseadas de una elocuencia desbordante, con hilaridad disfrazada, cosa que en la vieja Europa se ha sabido interpretar con mayor aceptación que en el basto, extenso y acartonado país que lo vio nacer, para ellos como para su madre mejor le hubiera valido montar una Farmacia, desde luego habría ganado más dinero. Invito a la revisión de obras como “Días de Radio”, “Balas Sobre Broadway” con un deslumbrante John Cusack, “Annie Hall” donde reprenda una de sus facetas mas controvertidas sin entrar a valorarlo, y un largo etcétera agradeciendole unas cuantas sesiones de psiquiatra que nos puede ahorrar, con clases magistrales incluidas en “Sueños de un Seductor” con la ayuda inestimable del gran ausente Humphrey Bogart, en esencia, no en presencia. Guiones de un genio fuera de la botella, de un contenido enorme que las mentalidades menos desengrasadas no puede evitar arcadas contra él y su prosa sin censura y desalmibarada. Presten atención a su crítica religiosa, más aún con la hebrea mamada desde la cuna que con las restantes, o sus guiños ácidos contra el Tercer Reich. No hace falta ir a una escuela de cine para convertirte en un referente pero sí para personificarte en el proscrito por antonomasia de Hollywood; no tendrá la fotografía de Bergman o la dirección de Coppola, pero posee algo que escasea sobre todo hoy en día en el cine moderno, un flujo inagotable capaz de sorprender después de 40 cintas y una más, consiguiendo que los críticos no logren ponerse de acuerdo para “desvelarnos” su mejor título. Os doy un consejo, disfrutarlo en toda su extensión. Así hablo Zaratustra , See you Later, Alligátor.
Barrabas
PARA MAL
Disfrutar, lo que se dice disfrutar, a ratos. Siendo esto una apreciación personal e intransferible. No le tengo al sr. Allen un odio irracional, eso sí, me parece que con una carrera tan extensa sólo ha parido tres grandes películas, la absurda, desternillante y por lo visto irrepetible "La última noche de Boris Grushenko", la notable "Annie Hall" y la tierna "Poderosa Afrodita". Esto unido a la sobrevaloradísima Manhattan convierte la existencia del pequeño gafapasta en un ligero incordio, como cuando te pica una pierna y te has roto los dos brazos. Que no es un gran director lo comparte hasta mi compañero, estamos hablando de Allen, no es Kubrick y no es Kurosawa. ¿Pero hay qué ser el más grande para hacer las cosas bien? Por supuesto que no.
Tampoco le pido que reinvente el Cine. Pero cuando la fórmula se repite más que los redactores del Popular1, cansa y yo soy más rutero. Esta afirmación puede ser hoy día discutible, no me refiero a lo de leer el ruta, pues con Match Point hay un cambio de tercio enorme. Vale, pero Match Point es una idea cachonda sacada de un libro de Dostoievski y para rematar (o volear) el guión es más bien flojo y el argumento no aporta nada que no apareciese ya en “Un lugar en el sol”, película de los años 50 con Montgomery Clift (guión y argumento no son la misma cosa).
En que como actor posee un registro más que limitado también estamos de acuerdo, pues bien, ¿70 años viviendo contigo mismo y no te das cuenta? Me cae simpático como actorcete, pero aunque como recurso cinematográfico tenga fundamento no aporta nada que se encabezone en protagonizar una y otra vez historias donde las mujeres le den calabazas forzándole a lanzar ingeniosos comentarios, pardiez. Carajo, protagoniza una serie, no la llames Sexo en Nueva York y deja a los directores de verdad hacer su trabajo.
Manhattan puede ser una de las películas más sobrevaloradas de la historia del cine, ¿será el título? ¿qué es en blanco y negro? Tiene diálogos ingeniosos como las cientos de películas de este señor, pero recomiendo que los escuches con atención, no hay carcajadas, así que atiende....mmm que pretencioso, ¿no crees? intelectualoide, soberbio, burgués, pero también anodina, fingir que esta película es un discurso existencialista o una crítica social es un insulto. Sólo sirve para que 4 acomodados neoyorquinos presuman de posición, no hay acidez más allá del estómago. A pesar de la velocidad de los diálogos, la cinta no posee ritmo. ¿Quieres ritmo, diálogos frescos y un gran guión? Pulp Fiction.
Si para apreciar una película hay que ver toda la filmografía de este señor. Apaga y vámonos. El arte como conjunto tiene su punto pero si algo no te resulta atractivo, hipnótico, disfrutable, entretenido por sí solo es que algo falla. Es el eterno engaño, si no has leído el libro, dudo que te guste la película que se dice. Pues eso es una pollada como una fabada de almendras, si la película es un truño lo será leas o no el libro, veas sus 15 películas anteriores o no. Para guiños a sus fans, Alonso Caparrós.
No es un genio. Es ingenioso. El cine por definición es una unión en perfecta armonía de imágenes en movimiento, el guión es una herramienta más, no es mucho más importante que el montaje, la puesta en escena o la música. Por ello la "maestría" de Woody me resulta más que discutible. Para proscritos Buñuel y Orson Welles.
Como último apunte, si alguien se mete con mi amigo por ser defensor de Woody Allen se las tendrá que ver conmigo antes.
Si por el contrario se quieren meter conmigo, manden un SMS al 8495 con la palabra JOPUTA y recibirán un sonitono de un servidor llorando. Con lo de servidor me refiero a mi, no al servidor proxy más cercano.
Med Vega (kick against the tetra-brick)
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