miércoles, 21 de noviembre de 2007

CRÓNICA. RUFUS WAINWRIGHT

Rufus Wainwright, Casino de Paris (19/11/2007)

El vástago de Loudon Wainwright III y Kate McGarride hace ya tiempo que merece que no se comience hablando de él mencionando a sus padres.
El exageradísimo songwriter canadiense-americano y su pop de cámara es, hoy día, uno de los espectáculos más soberbios y originales de los que se puede disfrutar. Un showman o entertainer de esos, que se desenvuelve con auténtica maestría ya sea defendiendo sus canciones a piano y voz como con una barroquísima banda de 8 miembros.

Con la huelga en la mente y la imposibilidad de volver a mi casa esa noche en el cuerpo (pero con la cabeza calentita gracias al regalo de una más que buena amiga, gracias nena), me personifiqué en el Casino de París, nada más entrar se atenuaron las luces al ritmo de Golden Years y apareció el señor Wainwright con su banda, el cantante lucía un smoking verde fosforescente con detalles amarillos que harían saltarle las lágrimas al mismísimo Elton John. El show comenzó con Release the Stars, canción que da título a su último trabajo y en mí opinión su disco más flojo hasta la fecha (lejos de su brillante y homónimo debút, que contaba con Van Dyke Parks como colaborador de excepción o de su segundo álbum Poses). La segunda canción de la noche fue Going to a Town, la cima de su último disco, una dura crítica a los Estados Unidos vestida de sensible temazo pop. Tras las primeras canciones Rufus comenzó a dirigirse al público, en el momento que deja de cantar y se pone a hablar su personalidad cambia por completo, de un caballero armado con una prodigiosa voz que en directo se convierte en mágica se convierte en una locaza con un finísimo sentido del humor que provoca las carcajadas de toda la asistencia con sus críticas a Francia y su huelgas, de la situación en la frontera de los EEUU con Canadá o de lo bien que se lo pasó en su reciente visita a España. En ese momento la banda abandona el escenario por primera vez en la noche, Rufus se sienta al piano y toca Cigarrettes & Chocolate Milk, la calidad del intérprete queda demostrada en cualquiera de las canciones que realiza pero cuando recurre a los temas de sus dos primeros trabajos el magnetismo que hace sentir es increíble. Luego también solo, interpretó The Art Teacher, una de las dos canciones del Want Two, dejándome con todas las ganas de escuchar The One you Love, pepinazo de tema que justifica el más barroco de sus álbumes. La banda vuelve a hacer acto de presencia y Rufus explica que para el tema que va a interpretar en ese momento, Between My Legs, en cada concierto participa un fan para recitar la parte hablada de la canción, la cosa termina con una oronda sudamericana besando al cantante y sin querer soltarlo. En ese preciso instante, cuando se cuenta con una hora de espectáculo, llega el momento del intermedio, 20 minutos para que Rufus se cambie de ropa y probablemente se ponga fino fino. Aunque no sé si tras su “experiencia” como adicto a la Metanfetamina en la que llego a quedarse ciego (en el sentido de pérdida de visión) durante semanas le habrá hecho escarmentar. En el intermedio sonarón Oh! you pretty things y Quicksand, casi ná...

El segundo acto se inicia con Consort y en esta parte del concierto en lugar del complicado smoking, viste un traje típico tirolés, con pantalones cortos y calcetines grises por encima de la rodilla, al verlo así disfrazado se hace complicado decir que este personaje tiene clase, pero la tiene. Tras desgranar casi por completo el Release the Stars, Rufus deja caer un Beautiful Child (del Want One) que a primera vista parece dejarle destrozado por el esfuerzo vocal, pero nada más lejos de la realidad, explica al público que va a cantar una canción típica irlandesa (Macushla) que le encanta a su madre y que le pide que interprete continuamente y decide hacerlo sin micrófono, a capella (di NO a Capello) y sin ser un tenor, sorprende su potencia de voz, cosa que no se aprecia tan claramente en estudio, tiene un timbre muy particular y hermoso, pero esa fuerza interpretativa no se le adivina (ahora dice estar trabajando en su primera ópera, espero que no se exceda en sus excesos y acabe pérdido). 14th Street es la última canción del segundo acto, donde aprovecha para presentar a su banda y estos a su vez, se lucen demostrando que son más que eficientes músicos.

En el tercer y último acto, Mr. Wainwright aparece con un albornoz blanco, se sienta el piano e interpreta I Don't Know What It Is, mientras toca se ve que lleva unas medias negras, ¿qué estará tramando? Completamente solo, interpreta Danny Boy, seguida de la preciosa Poses y para un servidor la cumbre de la noche: Complainte de la Butte, una versión de una canción del ’55 de Mouloudji, que aparecía en la BSO de Moulin Rouge! y que fue como conocí a este personaje (y en gran parte gracias a la insistencia de mi hermana).

Lo que vino después fue un final de show más que sorprendente, un espectáculo de baile, con Rufus disfrazado de Judy Garland versionando Get Happy y con todos los músicos haciéndo de Fredasteires, también sorprendentes la femeneidad de sus piernas y su desenvoltura disfrazado de mujer. Como bailarín ya aparecía en The Aviator de Martin Scorsese al inicio de la película con un número más que decente, pero en lo que desembocó el show fue un sindios de lo más inesperado. Como colofón, y con todo el público entregado Rufus a la guitarra toco Gay Messiah, su clásico fin de espectáculo, donde antes acababa sus performances siendo crucificado (cosa que Madonna copió vilmente).

Un artista diferente, con un talento y una voz que merecen atención, que en contra de lo que pueda parecer no lo ha tenido fácil siéndo hijo de dos artistas (sufrío una traumática violación en su adolescencia) y que en otros tiempos para la lírica sería una de esas exageradas estrellas encantadas de serlo, como Freddie Mercury, como Britney Spears...


Pd. Imperdonable que no cantara One Man Guy, la ya citada The one you Love o su versión del Hallelujah de Cohen (aunque bebe más de la de Jeff Buckley).


Por Med Vega (Shine on you Crazy Star)

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