CRÓNICA. MORRISSEY

MORRISSEY. Olympia (04/02/08)
Luces y sombras

Nunca ha sido santo de mi devoción, siempre me ha parecido un bocazas y su carrera en solitario tiene bastantes más sombras que luces. Pero es innegable que es uno de los últimos grandes “frontmans” de la Gran Bretaña y no esas cosas que se empeñan en ensalzar hoy día como el Doherty ese. Su arrogancia es necesaria.

La broma de las teloneras Girl in a Coma no duró mucho rato, una suerte de Green Day tex-mex con pintas EMO (sea eso lo que sea) que tuvieron la decencia de versionar a los Ramones para cerrar una actuación bastante pintoresca. Tras esto, proyecciones made in Morrissey: un clip de los New York Dolls, pruebas de vestuario de James Dean para Al este del edén, Brigitte Bardot y un vídeo de Sacha Distel con mención a Andalucía incluída. Luces fuera, adiós a las proyecciones y allí que apareció Mourrisé al son de un nuevo tema apropiadamente llamado “Throwing my arms around Paris”. A la que siguió la primera de las 5 canciones de los Smiths que interpretó en toda la noche, la embrujada How Soon is Now?

Moz va acompañado por 5 soldados que suenan que da miedo, tocan con una potencia y unas maneras impecables y en ocasiones demasiado ruidosos para la frágil y personal voz de la diva.

Como la ocasión era para presentar un próximo recopilatorio de su carrera en solitario (¿otro? ¿era necesario? ¿qué les pasa en Manchester qué cada grupo/solista tiene que sacar un recopilatorio cada vez que hace algo?) pues a eso se dedicó, dejo caer sus nuevos temas, interesantísimo All you need is me o el ya citado inicial, y a dar un repaso que se saltó el Viva Hate y que fue especialmente amable con el You Are the Quarry, el disco que volvió a ponerlo de actualidad. Pero el caso es que cuando sonaba un tema de los Smiths el cuerpo y alma de esas canciones le sacaba una diferencia astronómica a sus temas en solitario, tiene que ser jodido para un personaje de sus características el vivir de un pasado que aparentemente se empeña en despreciar, comentarios como “No compreís discos de los Smiths, el dinero se lo llevará ese batería” o “No todos podemos ser Kylie Minogue” no faltaron, ¡cómo no!...

A pesar de su personalidad este señor es un animal de escenario y sus cualidades interpretativas son admirables, 90 minutos de visible dedicación (nos reímos de Camacho pero este personaje sudaría el Sena entero) que a base de arrogancia y melancolía hicieron vibrar a todo un Olympia entregado.

“Al pan peich, al vino jorl...”

En buen estado de voz e incluso de forma (cada vez se parece más a mi tío Modesto Miguel, el cual se llama de primer nombre Modesto por error en el registro, si es que la vida puede ser tan cruel como los niños...) Moz cerró una actuación brillante con First of the Gang to Die. Él sabe que podría dar unos conciertos mágicos repletos de temazos inmortales pero se empeña en hacer ver que sin Marr también es grande, su público se lo perdona todo y él se crece si es que es posible crecerce ya más.



Por Med Vega (Flower Power ma non troppo)