lunes, 18 de febrero de 2008

CRÓNICA. NEIL YOUNG

NEIL YOUNG - Grand Rex (15/02/08)

Lloré.

Neil Young es un coloso, es una parte importantísima de la historia y una de las últimas leyendas vivas. Cada caricia a sus guitarras, cada paso sobre el escenario, cada mirada forman parte de una milimétrica lección de lo que la música debería ser.


Nunca antes me había emocionado tanto una actuación de un artista al que admirase, había llorado en otros conciertos, por supuesto, pero nunca sentí nada tan especial como en esa noche.

Mr. Young divide sus actuaciones en set acústico y eléctrico, en la primera mitad del concierto, no necesita nada más que la compañía de sus guitarras y sus dos pianos.

Apareció en escena tras el lienzo del pintor que durante toda la velada fue realizando diferentes obras, la mayoría para representar las diferentes canciones que interpretaba el Maestro. Young se sentó mientras la audiencia enloquecía y atacó "From Hank To Hendrix", bellísima, su personal voz se vuelve mágica y con unas cuantas notas ya te ha atrapado.

La parte acústica del concierto me enamoró perdidamente, por mi podía haber sido eterna (me hubiese venido de perlas de hecho), gemas del calibre de "Harvest", "Sad Movies", "Mellow my Mind", "After the Gold Rush", "The Needle And The Damage Done" y con la que puso el broche a esa parte de su actuación "Heart of Gold", son muy grandes, enormes, por mi podía haber interpretado los greatest hits de Locomía con dos palillos chinos y una cacerola que me hubiese gustado, pero es que este señor tiene un repertorio tan majestuoso que puede hacer cada noche conciertos mágicos sin repetirse. Con el corazón en la mano, ver una cosa así te hace querer ser mejor persona, transmitir bondad, abrazar a la vida, en fin…

Un descanso y el regreso de Young acompañado de Ben Keith, Anthony Crawford y el carismático Crazy Horse Ralph Molina, tal y como contó el propio Neil, «llevamos juntos desde los 60, desde 1860 me parece». Si el set acústico fue mágico el eléctrico no le fue a la zaga, el cual comenzó con una brillante "Mr. Soul", nadie en el mundo maneja y galopa en las distorsiones como Old Young. Tras presentar a su grupo, quiso dedicar un tema a Danny Whitten (muerto por sobredosis, primer guitarra de los Crazy Horse), "Winterlong", de una sensibilidad extrema que hizo que llorase como el hombre que soy.

Una acojonantísima "No Hidden Path" que puso en pie a todo el Grand Rex fue el previo a unos bises incontestables con "Cinnamon Girl" y un "Rockin’ in the Free World" apabullante. Yo había soñado con un bis con la ya citada Cinnamon Girl y Cortez the Killer pero no puedo negar que el subidón de que el propio Young interprete uno de sus más versionados temas con semejante resultado me puso el corazón en la boca, los cojones por los suelos, los puños al viento y la mente por las nubes. Brillante, mágica, espectacular, soberbia, apabullante y tremenda lección de rock, de vida.

Luego de postre, el detallazo de "The Sultan", con un Neil tras unas gafas del sol y con un señor disfrazado de Sultán golpeando un Gong.

Vayas a donde vayas, hagas lo que hagas, el "Everybody Knows This Is Nowhere" tenlo cerquita.


Por Med Vega (Motörheart of Gold)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Se me han puesto los pelos como escarpias (de nuevo) mientras leía el texto y recordaba la infinidad de sensaciones vividas durante los conciertos (yo tuve la suerte de asistir el 14 y el 15). Que grande el Tío Neil.

Por otro lado, decir que he descubierto el blog hoy mismo gracias a los amigos de "La Playa de Neil" (a los que conocimos en París). Curioso lo de Pozoblanco; yo estudio cerquita, en Almadén.

Un saludo.

Anónimo dijo...

La Playa de Neil, grandísimo Blog. Yo sigo en una nube, he asistido a dos conciertos después del del tío Young y ya no es lo mismo. Un antes y un después ha marcado este señor en mi vida. No creo que mi humilde crónica pueda llegar a expresar todo el remolino de sensaciones que aquello fue.
He escuchado el bootleg del jueves decir que fue mágico también, esa Like a Hurricane cojonudísima y cowgirl in the sand que dan ganas de romper en lágrimas (y van ya varias).

Un saludo Kiko!

SERIE B fanzine dijo...

Gracias Kiko de parte de todos los que hacemos Serie B. Agradecemos todo tipo de comentarios en nuestros contenidos, pero si además vienen de alguien con buen gusto, mejor.

Te hemos añadido a la sección de enlaces, al igual que a los chicos de la playa.

Saludos!

Eclipse dijo...

Aun me duran las sensaciones despertadas después de ver a Neil Young el 6 de marzo pasado en Londres. Y gracias a tu crónica ahora tengo el pulso más acelerado y la piel de gallina. Ahora toca encontrar las palabras para expresar lo que ese hombre-dios me hizo sentir. Preparo la crónica... pero sigo en el Hammersmith de Londres. Gracias Neil Young!